Lo que entendemos por liderazgo

(Ángel Maza López)

Como había comentado anteriormente, ciertas personas ven al liderazgo como mecanismo idóneo para alcanzar fama, dinero y poder, esto se explica en virtud de la fuerte incidencia que tiene el sistema imperante en la conducta de las personas, las cuales son sometidas al mundo de la competencia desleal, de la injusta concentración de la riqueza y del individualismo. Estas personas son capaces de propiciar la más alta traición, son desleales a su gente, no respetan los principios de la organización y fácilmente venden sus conciencias cual si fueran productos del mercado.

Por ello, quienes acuden al liderazgo en búsqueda de un status económico, político o social, jamás se interesan por desarrollar los grupos humanos que dirigen, estas personas tienen como único fin la satisfacción de sus intereses individuales, y para conseguirlo emplearan las herramientas que estén a su alcance sean justas o no.

¿Será que alguna organización, institución, o asociación, necesita este tipo de liderazgo?... ¿Qué tipo de liderazgo necesitamos nosotros? Busquemos las respuestas a estas interrogantes para poder construir juntos un nuevo tipo liderazgo.

Si coincidimos que el liderazgo requerido en el mundo de hoy, debe tener como fundamento la ética, el humanismo, la equidad, la paz y la justicia, entonces nos encontramos en el mismo camino, donde entendemos al liderazgo como un conjunto de principios, conocimientos y habilidades empleadas para dirigir grupos humanos que buscan la consecución de metas comunes; constituye un arte para servir a hombres y mujeres que persiguen un objetivo determinado, tanto individual como grupal. Por consiguiente no olvidemos que toda organización contribuye armónicamente al desarrollo de sus integrantes, al mismo tiempo que se plantea el crecimiento social.

Comprendiendo de esta manera al liderazgo, quienes estamos en condiciones de ejercerlo, lo convertimos en una herramienta para incidir positivamente en el ánimo y en la actitud de las personas. No empleamos nuestras habilidades para causar daño, ni mucho menos para considerarnos superdotados o superiores a los demás. Entendemos que somos simplemente orientadores, facilitadores, con enormes responsabilidades.

Ahora bien, cómo entender entonces al líder. En concordancia con esta apreciación del liderazgo, opinaríamos que el líder es un estratega que con sabiduría, valentía, carisma y prudencia, dirige a grupos humanos a la conquista de las metas, produciendo con su accionar, cambios trascendentales a favor de todos. Ser líder significa estar dotado de un conjunto de habilidades para orientar, coordinar, participar y desarrollar a las personas, organizaciones o instituciones. Es cumplir con las mejores acciones para alcanzar el objetivo deseado. No se trata de un individuo superdotado, sino sencillamente de un ser humano con habilidades y destrezas diferentes.

El Ing. Washington Sandoval, en el documento Liderazgo Integral, comenta que “el líder no es un ser de otro mundo, es una persona normal, hombre o mujer, con sus cualidades y defectos, con aciertos y errores, pero que siempre busca el bien común sobre los intereses personales, por lo que en la esencia misma del liderazgo están los valores positivos, orientados hacia el bien, conformados por las normas y principios de comportamiento aceptados por el medio y que forman parte de la cultura”.

El Poder de la Palabra.

La palabra no solamente es el instrumento que nos sirve a los seres humanos para comunicarnos. Es sobre todo, un mágico poder con una fuerza incomparable. En ella nos encontramos, nos conocemos, nos entendemos.

La palabra no nace de nuestros labios, sino que viene desde lo más profundo de nuestro ser. Surge desde dentro para expresar lo que pensamos y sentimos. No tiene temores ni dudas, a tal punto que cuando se la escucha viene con fuerza incontenible para romper todo silencio.

La palabra en los hombres de valor expresa fuerza y en los temerosos debilidad. Con la palabra se hace justicia, como también se condena a inocentes. Con la palabra podemos movilizar para la realización de grandes obras, o también como para destruir mundos.

La palabra es libre, es de todos, no tiene fronteras, no tiene dueño; ella va por el aire y el espacio, hasta llegar a los oídos de miles de conciencias humanas. Y aunque unos pocos quisieron arrebatarnos el derecho a la palabra, nunca lo lograron. Ahora necesitamos hacer presente nuestra palabra. Pero, para que sea escuchada y entendida, necesitamos conocer y estudiar la oratoria.

Importancia del liderazgo

Por: Ángel Maza López

Eduardo Chamba y Ángel Maza L.

El liderazgo está presente en todas las áreas de la vida, tanto en el campo como en la ciudad. Lo encontramos en la política, la educación, la salud, la empresa, en el gremio, en la cooperativa, entre otros aspectos más. Detengámonos un momento y observemos al interno de nuestras familias, sin la necesidad de caer en machismos, vamos a detectar personas que poseen mayor capacidad de influencia que otros, por lo general los padres ejercen autoridad sobre los hijos, los orientan y guían para toda la vida.


En el caso de los barrios, comunidades o pequeños poblados, existen consejos comunales, comités barriales, y otra diversidad de directivas que coordinan y desarrollan actividades tendientes a alcanzar mejoras. En las ciudades tenemos estructuras más complejas como los municipios que son liderados por grupos selectos, a nivel nacional asimismo contamos con gobernantes y otras autoridades que dirigen áreas concretas. En las instituciones, además de las principales dignidades, se crean secciones representativas de diferente tipo, que tienen programas y dirigentes claves. En las empresas se eligen a los jefes departamentales, al gerente y más dignidades para conseguir los objetivos de mercado trazados. En el campo también se constituyen pequeñas asociaciones para orientar la producción, para canalizar asesoría y apoyo financiero.

Y si continúan analizando la diversidad de movimientos sociales y políticos que existen, todos ellos requieren de equipos directivos idóneos.

Las personas que resultan seleccionadas para dirigir, son escogidas de entre el conglomerado por considerar que son las más hábiles. Incluso dentro de la organización puede existir una competencia sana y democrática entre los interesados, con el objeto de resultar favorecidos en la elección.

Como vemos, el liderazgo está presente en todo, por lo tanto es imprescindible prepararnos en esta área, sea cual fuere el trabajo que realizamos. Si somos estudiantes, nos preparamos para dirigir mejor a nuestro paralelo o al consejo estudiantil, si somos profesionales nos forjamos para incidir en el aprendizaje o el ejercicio profesional, si somos trabajadores, estaremos en mejores condiciones para representar el gremio. Si es dirigente social y político, contará con nuevas herramientas para conseguir los objetivos propuestos. El liderazgo hoy en día es parte de nuestra vida, razón por la cual no podemos evadirlo fácilmente.